martes, 23 de julio de 2013

El juez decreta prisión Dieguito 'el malo' 


por robo con intimidación en el atraco a un supermercado en Barcelona


BARCELONA, 26 (EUROPA PRESS)
El titular del Juzgado de Instrucción número 20 de Barcelona decretó hoy prisión para Juan Diego Redondo Puertas, Dieguito 'el malo', por robo con intimidación, detención ilegal y quebrantamiento de condena después de que el pasado miércoles mantuviera retenidas a nueve personas durante un intento de atraco de un supermercado Caprabo de Barcelona, según informaron a Europa Press fuentes judiciales. Su cómplice, un trabajador del establecimiento, quedó en libertad con cargos.

Dieguito 'el malo', huido de la cárcel de Brians desde el pasado mes de agosto, pasó esta mañana sobre las 8.30 horas a disposición judicial tras prestar declaración el jueves y el viernes en la comisaría de los Mossos d'Esquadra de la calle Bolívia.

PARA IR A LA ESCUELA.

A su llegada a los juzgados, Dieguito 'el malo' aseguró a los periodistas allí presentes que había robado para que su hijo "pueda ir a una escuela". "Los asistentes corruptos no me lo han llevado en tres años y eso que lo tienen a su cargo", comentó. Segundos antes de entrar, pidió perdón por lo que había hecho.

El atraco se produjo poco después de las 21 horas, con el establecimiento cerrado y sin clientes. El asaltante entró por una puerta lateral del supermercado por la que salía una trabajadora para tirar la basura y se coló en la cámara de los congelados. 

A aquella hora, los trabajadores se disponían a cambiarse de ropa y a marcharse a casa. Cuando Marcos V. entró en la habitación se encontró a Juan Diego, vestido con una americana oscura, camisa y corbata y con una mancha seca de sangre y apuntándole con una pistola 9 milímetros Parabellum.

El ahora detenido habría estado estudiando los movimientos de los encargados del establecimiento, situado en el número 14 de la calle Ganduxer, cerca de la avenida Diagonal. Aunque el trabajador gritó para que salieran el resto de empleados, el asaltante amenazó a todas las que iba encontrando, seis en total. El asaltante encerró con llave a las trabajadoras en una estancia y cogió al único empleado para buscar al encargado del local para abrir la caja fuerte.

30.000 EUROS Y UN JAMÓN.

Según su versión, Dieguito pidió la recaudación de aquel día, que según él era de 30.000 euros, y un jamón. No paraba de hablar y durante el secuestro se mostró muy nervioso, bebió cava y pidió cestas de Navidad insistiendo a las empleadas para que también cogieran una.

El atracador les ordenó que se vistieran con la ropa de calle y sobre las 22.30 horas, se puso una peluca grisácea y unas gafas, y con la pistola cargada y una navaja de diez centímetros de hoja en el bolsillo, salió por una puerta lateral andando entre las mujeres. 

Sin embargo, los mossos ya sabían quien era y agentes de paisano le detuvieron sin resistencia alguna, le condujeron a un vehículo policial sin logotipar y le llevaron a la comisaría de Les Corts. No hubo ningún herido.

Posteriormente, en el registro del local, los Mossos encontraron una bala de la pistola del asaltante que previamente había regalado al trabajador hecho rehén.

Momentos antes del atraco y secuestro, el detenido habría estado en un bar cercano a la zona tomando cerveza. Allí, se le habría caído una bala en el suelo que fue vista por el propietario y algún cliente. Dieguito, aunque mostró la pistola, no apuntó ni amenazó a nadie. Pagó su consumición y se fue tranquilamente.

Este es el primer atraco con secuestro que sufre un Caprabo en toda España, pero la compañía se muestra confiada que esto no afectará a las ventas, ya que no es responsabilidad de la empresa.

Dieguito el Malo se fugó para ayudar a su hijo


 Diego Redondo Puertas, Dieguito el Malo , de 46 años, uno de los reclusos históricos de las cárceles españolas y que lleva 15 días en búsqueda y captura tras fugarse de la prisión de Brians (Barcelona), ha declarado que se evadió para cuidar a su hijo, de 16 años. La revista Interviú le ha localizado en su escondite, en Andalucía, y publica esta semana una entrevista con el fugitivo. "Sé que ya me quedaba poco, pero tengo un hijo en la calle del que no se ocupan los asistentes sociales y una hija que murió electrocutada hace nueve años y cuyo juicio no ha salido. ¿Qué quieres que haga?", manifiesta Redondo Puertas. En el reportaje de Interviú , Dieguito el Malo explica que, tras fugarse durante un permiso, encontró a su hijo "en la calle, mal vestido, sucio, con malas compañías. Le tuve que comprar unas bambas. Se acuesta por la mañana y se levanta por la noche para salir. Le dije que me lo iba a llevar conmigo en cuanto pudiera".
Los suegros del preso fugado, que se habían hecho cargo del muchacho, no le pueden cuidar bien porque ya son muy mayores. Dieguito cuenta que percibió que su hijo comenzaba a andar el mal camino que él mismo ha recorrido y que no pudo soportarlo. El huido dice que piensa permanecer al menos un mes refugiado en su escondite, trabajando en una granja como si fuera un inmigrante ilegal.